El Efecto Piramidal
Abrimos este artículo abordando el llamado efecto piramidal. De manera general, llámase a éste a las consecuencias causadas en un objeto que ha sido expuesto a una pirámide. ¿Y cómo es esto? A continuación, nos disponemos a explicar, de pasada, el proceso: El mismo consiste, en primer lugar, en fabricar una pirámide. Ésta debe presentar medidas rigurosas, las mismas proporciones de la Gran Pirámide de Giza (cuya relación de dos veces el lado entre su altura debe dar el famoso número Pi, lo cual, permite, que el ángulo de inclinación de sus caras roce los 52 grados); debe evitarse ser hecha a base de hierro; es imprescindible que esté nivelada y, por último, uno de sus lados debe estar orientado al polo norte magnético (esto se hace con un brújula). En segundo lugar, el cuerpo, orgánico o inorgánico (como por ejemplo, una persona, o una sustancia líquida, como el agua), debe introducirse dentro de la estructura piramidal por lo menos por espacio de media hora. Al cabo del tiempo estipulado se verán efectos de esta clase: Mejoramiento de la salud del animal o la persona afectados; conservación de los alimentos colocados en el interior de la pirámide; crecimiento armónico e ideal de aquellas plantas que son sometidas a una “atmósfera piramidal”; optimización y acentuamiento de las propiedades de elementos tales como líquidos (agua, combustibles, vinos y demás), piedras, fármacos y afeitadoras, entre muchos otros.
No obstante, una pirámide tiene otras bondades… A saber: Facilita la relajación y la meditación; minimiza el impacto negativo de las radiaciones, químicos, agentes bacteriológicos y puede re-equilibrar el ambiente. Bajo ciertas condiciones se convierte en una barrera infranqueable para las energías, las fuerzas tales como la de la gravedad –es decir, dentro de una pirámide, en movimiento, se puede flotar, según los resultados de experimentos publicados por el Doctor Biofísico John DeSalvo – e incluso el espacio-tiempo (esto es, una pirámide puede ¡echar de su interior a una fracción del Universo!, haciéndose esta figura geométrica ¡inmaterial o fantasmal!). Pero allí no termina todo… El Doctor Físico-Químico José Álvarez López, primero, y los colaboradores del grupo científico encabezado por el Doctor, el Físico ruso Andrey Sklyarov, después, han sugerido que si usted sigue tratamientos vinculados a la Piramidología y habitare en recintos en forma de pirámide (quiere decir, si su casa y su sitio de trabajo presentaran forma de una casa piramidal), es perfectamente plausible que ¡su esperanza de vida sobrepasase la centuria de años!
Así mismo, el poder de la pirámide queda constatado por otras vías. Los estudios al respecto, vertidos en informes científicos, apuntan a que una construcción piramidal puede eyectar un flujo energético, esto es, un rayo –invisible al ojo humano–, tanto hacia arriba como hacia abajo de ella. Justamente, esto es lo que sucede con las pirámides egipcias, bosnias y, por supuesto, las americanas. Inclusive, hay evidencia fotográfica de ello (Véase la instantánea que se tomó de la pirámide de Kukulkán y que anda circulando por la internet, mostrando un rayo expulsado por esta edificación y que se pierde en las alturas del cielo).
La Forma Piramidal emite Energía hacia los Cielos
Ahora bien, ha llegado el momento de disertar sobre la médula del denominado efecto piramidal. Para cumplir con tal fin, es necesario comentemos algunas nociones relativas a la Cosmología. Para el mortal común el espacio y el tiempo son medidas separadas. Sin embargo, si nos fundamentamos en teorías como la de la Relatividad, del célebre Albert Einstein, notaremos cómo las dimensiones espaciales y temporales están unidas. Expliquémoslo en términos entendibles para el público: La teoría del Bing Bag afirma que en los albores del Espacio Exterior éste presentaba el tamaño de un átomo. Después, se produjo la explosión primigenia y empezó el Cosmos a expandirse hasta presentar las dimensiones actuales. Esta visión nos muestra un modelo de Espacio Sideral inflacionario y, con base a esta figura, podemos realizar la siguiente analogía para explicar la naturaleza del espacio y el tiempo: En realidad, no es correcto hablar de espacio y tiempo, de manera separada, debemos referirnos a ellos como el conjunto espacio-tiempo, siendo este último algo así como la superficie de un globo que, gradualmente, se va incrementando de tamaño. Los objetos celestes tales como galaxias se alejan entre sí en línea o trayectoria recta debido al aumento constante del radio del globo (en este caso el globo haría de Universo). ¿En cuál caso los cuerpos celestes siguen una trayectoria curva u elíptica? Sencillamente, cuando son capturados por otros objetos mucho más masivos o pesados que ellos mismos. Ejemplo: Nuestra Tierra tiene una trayectoria en forma de elipse alrededor de otro astro mucho más grande: El Sol. El lector se preguntará: ¿Por qué hay cuerpos como nuestro planeta que describen estos giros? Pues bien, hemos dicho que el continuo espacio-tiempo es como la superficie de un globo inflado con gas caliente. Imagínese, por un momento, que sobre esta superficie, se posiciona una bala redonda de cañón. Entonces, se verá como la referida superficie se abomba hacia abajo, lo cual significa que se ha distorsionado, deformado o curvado esa área de espacio-tiempo. La Tierra debería seguir una trayectoria en línea recta tal como lo haría un punto de ese globo inflable, pero como ha sido capturada por el Sol sigue una trayectoria circular. ¿Qué sucede si un cuerpo celestial es muy pesado? La respuesta no es muy difícil de imaginar: Si se colocase sobre la superficie del globo (la cual sería el espacio-tiempo) un cuerpo extremadamente pesado, se rompería creando un orificio (un agujero negro), donde en su interior no hay ni espacio ni tiempo, porque precisamente en esa zona se destruyó dicho espacio-tiempo. Esta conjetura einsteiniana fue confirmada en parte cuando se han llevado a cabo este par de mediciones: A. La teoría de Einstein predecía que nuestro Sol desvía los rayos de otras estrellas. Esta aseveración se ha demostrado al producirse los eclipses, puesto que en esos momentos se ha observado con telescopio en mano, que la posición de varias estrellas ha cambiado. Profundicemos en dicha cuestión: Cuando todavía hay luz solar usted puede ver una estrella en una región de la bóveda celeste. Pero, realmente, no está en esa zona del Cielo debido a que el Sol desvía los rayos de esta estrella que se ve a simple vista. Entonces, lo que usted ve es una posición engañosa de la estrella. Sin embargo, si el Sol es solapado en parte por un eclipse lunar, ya usted no verá a esa estrella en el área donde habitualmente aparece, sino en otra región del espacio visible (esto se debe a que la luna anula la acción de algunos rayos solares). En consecuencia, una estrella como el Sol afecta el espacio y el tiempo. B. Se han realizado mediciones de tiempo al ubicar un reloj fuera de la Tierra y situar otro cronómetro dentro de nuestro mundo azul. Ambos, han medido un mismo tipo de evento (pongamos por ejemplo el caso del movimiento rotario de uno de nuestros brazos). Lo sorprendente del caso es que el tiempo del evento producido en el espacio ha sido más rápido o pasa más deprisa (aunque, digamos, en el orden del décimo de segundo). La conclusión es que un astro, como por ejemplo, nuestro globo terráqueo, comprime el tiempo (si fuera un objeto hiper masivo como un agujero negro ¡anularía totalmente la dimensión del tiempo!).
Con esta interesante explicación, ya podemos proceder a definir cómo opera o cómo se comporta el efecto piramidal. El Químico Farmacéutico Alberto Borrás interpreta los resultados del siguiente par de experimentos: 1. A finales de los años 60, se hizo un análisis del ingreso de los rayos cósmicos a la llamada Pirámide de Kefrén (Egipto). ¡Se concluyó que eran desviados tal como lo hace el Sol con los rayos de otras estrellas! Es decir, la pirámide funciona como una estrella, curvando las regiones de espacio-tiempo aledañas a ella. 2. Estudio del afilamiento de las hojillas de afeitar dentro de una pirámide a escala. Empleando un instrumento conocido como microscopio, puede apreciarse como una hojilla desgastada por el uso, muestra en sus extremos cortantes unos “dientes de sierra”. Luego de estar expuesta varios días dentro de una pirámide, la susodicha hojilla ha perdido sus dientes, microscópicamente, hablando, su extremo se ha alisado, nuevamente, volviendo a su estado original, como si estuviera recién salida de la fábrica. En suma, ¡La pirámide actúa como si fuera alguna clase de cámara del tiempo!
Siguiendo con la tónica tratada, en las próximas líneas insistiremos en esta última sensacional afirmación y lo haremos a través de unas pruebas experimentales. El arriba citado Doctor Sklyarov recoge los resultados de laboratorios rusos. Ellos se dieron cuenta que las plantas crecen más rápido de lo normal dentro de una estructura piramidal, esto les ha permitido conjeturar que la pirámide incide en el tiempo en algún grado.
Escrito por Marco Rango.
NOTA ÚNICA: Si se desea profundizar, léase artículo El rompecabezas de la Construcción y el propósito de la Pirámide, de Sklyarov, disponible en su versión original en https://lah.ru/text/sklyarov/zth-book/01-text.htm, o traducido al español en https://translate.googleusercontent.com/translate_c?depth=1&hl=es&prev=search&rurl=translate.google.co.ve&sl=ru&u=https://lah.ru/text/sklyarov/zth-book/01-text.htm&usg=ALkJrhims2w72m73HRiqaJK0yPWm1VtyYA. Otros documentos de gran importancia al respecto están en los siguientes links de Gabriel Silva: https://www.piramicasa.com/energiapiramidal.htm, https://www.piramicasa.es/es/articulos.htm, https://piramicasa.wordpress.com/tag/efecto-piramidal/ y https://www.piramicasa.es/es/videos_de_piramides.html.